Cine CRÓNICAS DEL DESAMOR

El hallazgo del amor antecede al despecho y el dolor.

Qué curioso. Esta película se incluye en el campo de la llamada comedia romántica pero no cuenta una historia de amor. Más bien se trata de un relato del desamor, del despecho y del dolor íntimo. (500) días con ella funciona como una suerte de memoria de Tom Hansen, un muchacho que cuenta —de forma no lineal, de atrás hacia adelante y de adelante al medio y así— los 500 días que pasó con Summer Finn, la chica de sus sueños, quien nunca logró establecer un compromiso afectivo con él. El debutante Marc Webb plantea una historia personal —vivida por él— en una suerte de exorcismo cinematográfico que revela su capacidad para narrar y para subvertir los códigos de los géneros. Un film sobre los caprichos del amor. 

El reconocimiento que ha obtenido este primer largo de Webb se debe a su peculiar forma de narrar una historia profundamente común que pertenece al colectivo afectivo de los seres humanos del planeta. Mucho bolero se ha cantado —y sollozado— al respecto. No le interesó reivindicar el amor como premio a la constancia y la entrega de sus protagonistas como mecanismo para alcanzar la felicidad. Para nada. Tampoco pretendió establecer una heroína romántica en Summer. Nada más lejos. En cambio, sí se planteó abordar el despecho y la búsqueda de la esperanza desde la perspectiva masculina. En este caso quien sufre es un hombre y no una mujer. Es un hombre que aborda su afectividad con ciertas conductas consideradas exclusivamente femeninas. «Quiero saber a dónde va esta relación», le dice a Summer, en una sinceración de emociones. Tom intenta comprender las conductas y actitudes de Summer. Las perdona. Reincide en su búsqueda. Padece su desamor. Son pocas las películas que abordan la afectividad desde la óptica de los varones —Hable con ella, de Almodóvar, es un clásico en este sentido— y Webb formula su historia sin venganza y con perdón. No pretende ser misógino ni culpar a la chica de su conducta. Sólo son cosas que pasan. 

El director norteamericano de 36 años realizó un ejercicio de estilo que —dentro de la sencillez de su planteamiento— ofrece una cierta complejidad narrativa que a ratos desconcierta al público. La estructura del relato —un día adelante, otro atrás, uno al medio, vuelta adelante, de nuevo al final— impide que el discurso tradicional se exponga. Desde el principio Tom le explica al espectador que Summer termina con él, que no lo ama, que ella prefiere ser libre, pero de inmediato evoca el día cuando la conoció o cuando hicieron el amor por primera vez, para regresar a la lejanía afectiva que plantea Summer y luego al reconocerse ambos en una canción de The Smiths o al constatar que a ella le gusta los discos de Ringo Starr, etcétera. Son estampas, momentos, viñetas, que organizadas de esta forma zigzagueante ofrecen un cuadro terrible de despecho y desamor. El espectador debe ir organizándola a medida que el montaje se desborda. Hasta que descubre que el otoño sigue al verano. 

Una historia como ésta exige retos interpretativos a jóvenes y aún desconocidos actores como el muy convincente Joseph Gordon-Levitt en el rol del obsesionado Tom Hansen y la muy hermosa y seductora Zooey Deschanel como la caprichosa Summer Finn. Aunque ella es el centro de la trama, él es quien la relata, el que matiza las situaciones, el que empuja la historia hacia delante o hacia atrás. En correspondencia, la aparente pasividad de Tom permite que Gordon-Levitt desarrolle su personaje sobre la base de sus dudas, sus miedos y su proceso de crecimiento emocional. Más bien Summer permanece igual, sin desarrollo, salvo cuando toma una repentina decisión. Sobre ambos personajes e intérpretes recae el mayor peso del film, matizado por personajes secundarios que entran y salen como parte del paisaje y no como factores de incidencia en la historia. 

(500) días con ella ha dividido las opiniones de los espectadores, Hay quienes la detestan o no la comprenden o no les interesa el tema, pero hay otros que adoran su planteamiento y la forma como fue resuelto. Yo me ubico un poco más al centro, desde la óptica de los que disfrutamos el film. Creo que es una película de bastante interés que presenta el trabajo de un director debutante con un elenco que está llamado a convertirse en estrellas. Esperemos los próximo trabajos de Marc Webb. 

(500) DÍAS CON ELLA (“(500) days of Summer”), EEUU, 2009. Dirección: Marc Webb. Guión: Scott Neustadter y Michael H. Weber. Producción: Mark Waters, Jessica Tuchinsky, Mason Novick y Steven J. Wolfe. Música: Mychael Danna y Rob Simonsen. Fotografía: Eric Steelberg. Montaje: Alan Edward Bell. Diseño de producción: Laura Fox. Vestuario:Hope Hanafin. Elenco: Zooey Deschanel, Joseph Gordon-Levitt, Clark Gregg, Matthew Gray Gubler, Rachel Boston, Geoffrey Arend, Chloë Grace Moretz, Minka Kelly, Patricia Belcher. Distribución: Cines Unidos. 

  

.

Anuncio publicitario

Acerca de Alfonso Molina

Alfonso Molina. Venezolano, periodista, publicista y crítico de cine. Fundador de Ideas de Babel. Miembro de Liderazgo y Visión. Ha publicado "2002, el año que vivimos en las calles". Conversaciones con Carlos Ortega (Editorial Libros Marcados, 2013), "Salvador de la Plaza" (Biblioteca Biográfica Venezolana de El Nacional y Bancaribe, 2011), "Cine, democracia y melodrama: el país de Román Chalbaud" (Planeta, 2001) y 'Memoria personal del largometraje venezolano' en "Panorama histórico del cine en Venezuela" (Fundación Cinemateca Nacional, 1998), de varios autores. Ver todo mi perfil
Esta entrada fue publicada en 1 y etiquetada , , , . Guarda el enlace permanente.

Deja una respuesta

Por favor, inicia sesión con uno de estos métodos para publicar tu comentario:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Imagen de Twitter

Estás comentando usando tu cuenta de Twitter. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s